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viernes, 15 de abril de 2016

Antropo-notis 2016 ¿Caballitos de mar en el lago Titicaca?


Con esta nota breve doy inicio a otra nueva sección de mi blog dedicada a compartir gacetillas provenientes de diferentes partes del mundo con las novedades que mis colegas tan generosamente comparten y que me divierte presentar con el título "Antropo-notis".
Doy inicio formal a esta sección con una información  del grupo de antropólogos peruanos.

La figura de cerámica de un hipocampo descubierta en el lago Titicaca en 1945 por Arthur Posnansky, y registrada en su obra Tihuanacu, cuna del hombre Americano, ha sido expuesta por primera vez recientemente en el Perú.



Se presume que la cerámica representa la presencia de hipocampos que habitaban las aguas de un mar antiguo que tras fusionarse con aguas de los deshielos en una pasada época glacial dieron origen al lago sagrado actual.
La especie lacustre que Posnansky denominó Hipocamppus Titicacensis es conocida en aymará como Challwatayka, o madre de los peces, una deidad del lago sagrado.
“Los habitantes de la región lacustre saben de su existencia” dice el arqueólogo boliviano Osvaldo Rivera, quien también encontró restos de fauna marina en la zona de Río Abajo, y en La Paz. Rivera explica que las civilizaciones prehispánicas respetaban y reverenciaban la fauna lacustre. Como respuesta a la integración plena a los ecosistemas naturales, algo que demuestran otros hallazgos arqueológicos en la zona del Tihuanaku y el Titicaca.

Existen aproximadamente 50 especies conocidas de caballitos de mar (Hippocampus). El más pequeño mide 15 mm de longitud y el más grande sobrepasa los 29 cm. Habitan aguas tropicales y templadas, entre algas, manglares y corales. Se alimentan de pequeños crustáceos que aspiran a través de su hocico pues no disponen de dientes.

Entre las singularidades que presentan, observamos que es de las pocas especies acuáticas que eligen una pareja para toda la vida, a tal grado que cuando uno de ellos muere prematuramente el otro simplemente no puede seguir adelante y muere al poco tiempo. Aunque muchos románticos prefieren decir que se mueren de amor  dando origen a muchas leyendas.


Las leyendas hallan su fundamento cierto en que los caballitos de mar mantienen una relación monógama muy estrecha,  con mucho contacto físico  y un cortejo con baile sincronizado que puede durar hasta ocho horas.

Lo más curioso de los caballitos es que son los únicos en el mundo animal donde los machos experimentan el embarazo. Si bien en la naturaleza hay otros ejemplos de machos que se encargan de sus crías o sus huevos, los caballitos de mar son los únicos que además de cargarlos dentro de sus cuerpos los proveen de alimento, oxígeno y finalmente dan a luz.
¿Por qué son los machos quienes se encargan de la gestación y parición de las crías? Tiene que ver con el principio de Bateman, propuesto por el genetista inglés Angus Bateman (1919-1996) según el cual  las hembras invierten más energía en el proceso de reproducción que los machos. Aunque a primera vista pareciera que gestar los huevos y darlos a luz resulta costoso para el macho, la hembra invierte el doble de energía para generar los huevos, de tal forma que tanto la leyenda del Tihuanaku (que remite al hipocampo como madre de los peces) como  el principio de Bateman quedan confirmados.

La dirección del video que se presenta a continuación  (al que ustedes pueden acceder haciendo un click en el enlace correspondiente) y la Galería de Fotos nos ofrecen un pantallazo algunas de las curiosas variedades de caballitos de mar que pueblan las aguas, todas preciosas para inspirarnos con su ternura.









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