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domingo, 28 de agosto de 2016

Antroponotis. Piedras Talladas Precolombinas


En la entrada de hoy comparto con ustedes el hallazgo por parte de un equipo de arqueólogos aficionados de lajas talladas que demuestran la presencia de civilizaciones preincas. Resulta llamativo que con anterioridad a los estudios del arqueólogo peruano Julio Tello la búsqueda arqueológica precolombina estuviera focalizada en las construcciones monumentales incaicas, invisibilizando la presencia de los poderosos Estados de cuya alianza emergió el Imperio Inca.
Repitiendo verdades de Perogrullo, en Ciencia todo hallazgo depende de lo que se quiere hallar.

La noticia es gentileza del grupo de Arqueólogos del Perú.



Nunamarca, Chilia (Perú)
Hallazgo de piedras talladas preincas 
por un grupo de arqueólogos aficionados


El sitio denominado “Piedras Talladas” se encuentra ubicado a una altitud de 3534.m.s.n.m. al oeste de la Provincia de Pataz, en el distrito de Chilia, Perú. En 1937, Julio C. Tello encontró lajas y estelas, dando inicio a los estudios sobre la presencia de civilizaciones correspondientes a estados preincaicos. Tales lajas posteriormente se destinaron al Museo de Antropología de la Universidad de San Marcos en Lima.

Recientemente, arqueólogos aficionados encabezados por un grupo de profesores bajo la dirección del maestro Carlos Varas Escalante, han descubierto además importantes restos pre-colombinos en el pueblo de Nunamarca, cerca al pueblo de Chilia, en la provincia de Pataz, departamento de La Libertad, a un día de viaje desde Trujillo. Se trata de restos arqueológicos con frisos realmente impresionantes con construcciones, muchas de las cuales están a la vista y otras cubiertas por la maleza y los propios campos de cultivo.

Al lugar se le ha dado en llamar la “Ciudadela de Nunamarca” y se ha pedido la inmediata intervención del Instituto Nacional de Cultura, porque han comenzado a llegar los depredadores que desmantelan las construcciones para llevarse los ladrillos de piedra que tiene preciosas figuras en alto y bajo relieve.


sábado, 20 de agosto de 2016

Fuerte embestida al paradigma de la migración americana a través de Beringia


                               Imágenes de mamuts, fuente de recursos para grupos humanos 
                                             durante las migraciones en suelo americano
“Beringia fue un puente de tierra o amplio territorio que abarcaba el extremo oriental de Siberia (Asia), el oeste de Alaska (América) y la mayor parte del actual mar de Bering, el cual se formó en dos períodos durante la última glaciación. La mayor parte del puente estaba donde actualmente se encuentra el estrecho de Bering.
Su primera formación sucedió aproximadamente 40.000 años AP manteniéndose unos 4.000 años. Su segunda formación se produjo aproximadamente 25.000 años AP permaneciendo hasta aproximadamente 11.000-10.500 AP, a partir de lo cual volvieron a subir las aguas una vez finalizado el período de la glaciación, inundando gran parte del territorio y separando Asia de América por el Estrecho de Bering.
El puente de Beringia resultó fundamental para la migración de plantas y animales entre ambos continentes. Existe un consenso generalizado que a través del mismo pasaron grupos de seres humanos al actual territorio americano” (Información proveniente de la conocida y nunca bien ponderada Wikipedia)

 “Lo que a nadie (se le había ocurrido imaginar) es a partir de cuándo el corredor (de Bering) se hizo biológicamente viable. Es decir, en qué momento se pudo sobrevivir al largo y difícil viaje a través de él”
 “Si bien los humanos pudieron haber viajado a través de este corredor hace unos 12.600 años, habría sido impracticable antes, ya que Beringia carecía de recursos cruciales como la madera para combustible y herramientas, y animales de caza que eran esenciales para el estilo de vida del cazador-recolector”.
 “El escenario más probable es que llegaran por la costa del Pacífico”.

                                                                                           (Revista Nature)


Hola amigos. He decidido encabezar la entrada de hoy compartiendo aspectos centrales de la noticia que muchos de nosotros hemos recibido en esta semana y cuestiona severamente el paradigma que durante décadas ha dominado las hipótesis del Poblamiento Americano.

Además de compartir públicamente la información inicial de Nature proporcionada por la Agencia SINC que circuló por nuestros correos, quisiera llamar la atención sobre ciertas cuestiones metateóricas.
En primer lugar, el Equipo de Investigación revindica la mirada novedosa que se vale de recursos genéticos para abordar aspectos que como ellos mismos señalan “A nadie se le había ocurrido antes”, conclusión que nos introduce de lleno en el ámbito de la creatividad en los abordajes científicos.
En segundo lugar, no resulta fortuito que el estudio haya sido elaborado por equipos europeos procedentes de Cambridge y Copenhague. Sabido es que la “policía Clovis” norteamericana se encuentra fuertemente atrincherada en la hipótesis que sostiene la primacía del origen del poblamiento de América a través de Beringia hace poco más de 12.000 años. Se trata de un paradigma que relativiza la antigüedad de otros yacimientos sudamericanos, y cuestiona fuertemente los fechados anteriores al registro de sitios Clovis, y pone al descubierto los intereses históricos para mantener la hegemonía en política académica. La práctica científica real, como sabemos, se encuentra bastante alejada de cualquier supuesto de neutralidad valorativa
En tercer lugar, al encontrar evidencias fiables que cuestionan el ingreso inicial de grupos homo sapiens al territorio americano a través de Beringia, se proporciona un nuevo impulso a las teorías que sostienen el temprano poblamiento americano por contingentes que pudieron arribar al territorio desde el mar de modo similar a quienes arribaron a las costas de Australia hace 50.000 años, supuesto que no se discute.



Referencias Bibliográficas:

Eske Willerslev et al. “Postglacial viability and colonization in North America´s ice-free corridor” Publicado en revista Nature   DOI: 10.1038/nature19085

Entradas anteriores sobre poblamiento americano:

Poblamiento Americano I - Aportes de Gustavo Politis

Poblamiento Americano II - Piedra Museo

Poblamiento Americano III - Monte Verde

Poblamiento Americano IV - Pedra Furada


La llegada de los humanos a América no pudo ser como cuentan los libros

Agencia SINC

La teoría establecida sobre la ruta por la que los pueblos de la Edad del Hielo alcanzaron el continente americano ha sido refutada por los científicos. Un estudio genético sin precedentes concluye que su supuesta ruta de entrada por un corredor entre Siberia y Alaska era “biológicamente inviable" para los primeros pobladores.
Fundamentalmente, demostraron que hasta   hace unos 12.600 años no había plantas, ni animales en el corredor, lo que significa que los seres humanos que quisieran pasan a través de él no habrían tenido recursos vitales para sobrevivir.

De acuerdo con las hipótesis más aceptadas, las primeras personas que llegaron a Norteamérica habrían pasado al continente a través de un antiguo puente de tierra entre Siberia y Alaska. Tuvieron que esperar a que dos capas grandes de hielo que cubrían lo que hoy es Canadá comenzaran a retroceder, hasta que se creó el llamado ‘pasillo libre de hielo’ que les permitió moverse hacia el sur.
Sin embargo, un nuevo estudio publicado en la revista Nature echa por tierra esta teoría. El equipo internacional de investigadores, dirigido por el profesor Eske Willerslev, genetista evolutivo de Centro de GeoGenetics de la Universidad de Copenhague y de la Universidad de Cambridge, utilizó ADN antiguo extraído de un punto crucial dentro de este corredor para investigar cómo evolucionó su ecosistema cuando los glaciares comenzaron a retirarse.
Los científicos crearon una imagen completa que muestra cómo y cuándo emergieron la flora y la fauna cubriendo el hielo de esta ruta de paso hasta hacerla viable, un proyecto de reconstrucción de la prehistoria como nunca se había hecho antes.
Los investigadores señalan que, si bien los humanos pudieron haber viajado a través de este corredor hace unos 12.600 años, habría sido impracticable antes, ya que carecían de recursos cruciales como la madera para combustible y herramientas, y animales de caza que eran esenciales para el estilo de vida del cazador-recolector.
"La conclusión es que a pesar de que el corredor físico estuvo abierto desde hace 13.000 años, hasta varios cientos de años más tarde no fue posible utilizarlo", dice Willersley. “Lo más probable es que los primeros pobladores migraran a lo largo de la costa del Pacífico”.
Si esto es cierto, entonces significa que los primeros americanos, que ya estaban presentes al sur mucho antes de esta fecha, tuvieron que hacer el viaje por otra ruta. Los autores del trabajo sugieren entonces que es probable que migraran a lo largo de la costa del Pacífico.
¿Quiénes eran esos primeros pobladores?
Quién fue aquella gente todavía es muy discutido. Los arqueólogos están de acuerdo, sin embargo, en que los primeros habitantes de los modernos Estados Unidos incluían a la llamada cultura Clovis, que aparece por primera vez en el registro arqueológico hace más de 13.000 años.
Los científicos europeos sostienen que el corredor libre de hielo habría sido completamente intransitable en ese momento.
"Eso significa que las primeras personas que entraron en lo que ahora son los EE UU, América Central y del Sur tomaron una ruta diferente. Si se cree que estas eran Clovis, u otras personas, simplemente no podrían haber llegado a través del corredor”, declara el investigador.
Mikkel Winther Pedersen, estudiante de doctorado en el Centro de GeoGenetics que llevó a cabo el análisis molecular, añade: "El corredor libre de hielo fue considerado durante mucho tiempo la vía de entrada principal para los primeros americanos. Nuestros resultados revelan que simplemente se abrió demasiado tarde para que eso hubiera sido posible".
El corredor habría tenido unos 1.500 kilómetros de longitud, y emergió al este de las Montañas Rocosas hace 13.000 años en lo que hoy es el oeste de Canadá, cuando las capas de hielo Cordillera y Laurentide desaparecieron.

Un corredor inviable para sobrevivir al viaje
Sobre el papel, esto encaja bien con el argumento de que los Clovis fueron los primeros en dispersarse por América. La primera evidencia de esta cultura, que lleva el nombre de las herramientas de piedra encontradas cerca de Clovis, Nuevo México, también data aproximadamente del mismo tiempo, aunque muchos arqueólogos creen que otras personas llegaron antes.
"Lo que nadie había examinado es cuándo el corredor se hizo biológicamente viable. Cuándo se pudo sobrevivir al largo y difícil viaje a través de él", indica Willersley.
La investigación se centró en un ‘cuello de botella’, una de las últimas partes del corredor en estar libre de hielo, y ahora cubierto en parte por el Lago Charlie en British Columbia y el Lago Spring de Alberta –los dos de la cuenca de drenaje del río Paz de Canadá–.
El paso se hizo transitable hace unos 12.600 años
El equipo reunió pruebas, incluidas fechas de radiocarbono, polen, macrofósiles y ADN, tomadas a partir de núcleos de sedimentos lacustres, que obtuvieron de la superficie del lago congelado durante la temporada de invierno. El equipo de Willersley, hace 13 años, demostró que es posible extraer ADN de plantas y mamíferos antiguos de los sedimentos, ya que contienen fósiles moleculares de sustancias tales como tejidos, orina y heces.
Después de conseguir el ADN, el equipo aplicó una técnica denominada ‘secuenciación escopeta’. "Es increíble lo que se puede obtener. Hemos encontrado pruebas de peces, águilas, mamíferos y plantas. Esto demuestra la eficacia de este enfoque para reconstruir ambientes del pasado", apunta el científico.
Así pudieron ver, con notable precisión, cómo se desarrolló el ecosistema del cuello de botella. Fundamentalmente, demostraron que antes de hace unos 12.600 años no había plantas, ni animales en el corredor, lo que significa que los seres humanos que pasan a través de él no habrían tenido recursos vitales para sobrevivir.
El paso al ecosistema de zonas verdes
Hace unos 12.600 años, la vegetación esteparia comenzó a aparecer, seguida rápidamente de animales como el bisonte, el mamut lanudo, conejos y ratones de campo. Los investigadores identificaron una transición a un ecosistema de zonas verdes, es decir, un paisaje densamente poblado de árboles, alces y águilas calvas, que habrían sido recursos cruciales para la migración de los seres humanos.
En algún lugar intermedio, los lagos de la zona se poblaron de peces, tales como el lucio y la perca. Por último, hace unos 10.000 años, hubo otro momento de cambio, esta vez hacia un bosque boreal, que se caracteriza por los abetos y los pinos.
El hecho de que Clovis estuviera presente al sur del corredor antes de hace 12.600 años significa que no llegaron viajando a través de él. David Meltzer, arqueólogo de la Universidad Metodista del Sur (EE UU) y coautor del estudio, concluye: "No hay pruebas convincentes de que a la cultura Clovis le precediera una población más temprana y, posiblemente, separada. De cualquier manera, los primeros que llegaron a América en la Edad de Hielo se encontraron con un corredor intransitable". 
El escenario más probable es que llegaran por la costa del Pacífico.
                                                                               Hasta la próxima amigos!!!



sábado, 13 de agosto de 2016

17 de agosto, Día del Libertador San Martín. Aspectos poco difundidos del Gran Estratega


              
 Cruce de los Andes. Paso el Portillo hacia Chile 

"Los ejércitos se mueven sobre sus estómagos"

Estos días feriados dedicados a conmemorar la muerte del General San Martín resultan más que adecuados para reflexionar sobre la gesta y valores del líder que logró sostener y guiar a un enorme ejército durante el épico Cruce de los Andes para liberar a Chile y posteriormente al Perú.

En la Argentina, desde hace años se organizan expediciones regulares desde la provincia de Mendoza que reproducen el histórico cruce. Quienes han participado de la experiencia, suelen decir que no se trata de “turismo aventura”. El viaje se realiza con caballos y mulas, igual que lo hizo San Martín, y la falta de señal en los modernos celulares, no solo los desconecta del mundo civilizado, sino que propicia el contacto con las propias emociones y obliga a depositar la confianza a en las mulas conocedoras del recorrido mientras se atraviesan los escarpados.
Nadie vuelve igual de tamaña experiencia, transformador Rito de Pasaje hacia los  Valores de las cosas importantes en la vida.

Expedición Cruce de los Andes 

Francisco J. Miranda,  de origen peruano y casi homónimo del precursor venezolano, publicó hace poco en un portal  dedicado al cuidado de recursos marinos una valiosa información sobre aspectos no tan conocidos del General San Martín.
La descripción del sable corvo del general le sirve como excusa para reflexionar sobre sus valores, y entender las razones que se esconden detrás del renunciamiento ante Bolívar en Guayaquil.
Sin embargo, la parte que más me llamó la atención del escrito, fue la información poco difundida sobre el cuidado nutricional que el Libertador argentino tuvo para atender adecuadamente a su ejército.
Se trata de la introducción absolutamente novedosa para la época de una variedad de verduras deshidratadas para completar el menú de la tropa y contribuyó sin dudas a mantenerlos fuertes y bien nutridos.

El "Charquicán del Libertador"
El “Charquicán del Libertador” habría tenido su inspiración en una preparación que se adjudica a la civilización de Caral, hace 5000 años.
La palabra “Charquicán” viene de la lengua quechua y significa "carne secada al sol", pero el plato tradicional andino cuenta entre sus antecedentes con el hallazgo de restos de peces y mariscos descubiertos en el complejo arqueológico de Caral, cercano a la ciudad de Lima. 
Los arqueólogos hallaron las muestras más antiguas de Anchoveta (pescado típico de las costas limeñas) secada al sol, luego de haber sido saladas previamente.
Existían numerosas recetas del “Charquicán” a lo largo los Andes, pero siempre contaban con Charqui (carne seca) y papa como base.  A partir de las papas deshidratadas en la receta tradicional, al general San Martín e le ocurrió la innovadora idea de deshidratar diferentes verduras para aumentar los nutrientes de la comida de campaña. Se trata de una estrategia novedosa para cubrir las necesidades de su ejército con un alimento completo, concentrado y fácilmente transportable. 
El "Charquicán del Libertador"  receta original que figura en documentos históricos ha sido descrito como un "Guiso en base a charqui en hebras y  molido en el mortero que se añade a una olla con cebolla rehogada con aceite o grasa. Se agregan papas y zapallo, porotos tiernos, arvejas, ajos y otros vegetales. Finalmente, se condimenta con sal, pimienta, ají y orégano". 
Es una receta que responde claramente a provisiones y previsiones impulsadas por un líder atento a las necesidades su ejército.
En lo personal, no puedo menos que comparar al General San Martín con los infames militares argentinos que durante la Guerra por las Malvinas se despreocuparon de hacerle llegar a sus propios soldados la gran cantidad de alimentos mantenidos a resguardo en los depósitos de las islas. Las revueltas por el hambre y el frío que pasaron los jóvenes enrolados no profesionales, desabastecidos y abandonados a su suerte fueron sofocadas con enorme violencia y obligados a silenciar lo sucedido al regreso. Sin duda, fueron militares indignos del ejército Libertador. 

El autor peruano concluye la nota con la siguiente reflexión:
“En 1838, antes que San Martin falleciera, Carl Heinrich Knorr perfeccionó el método de deshidratación de vegetales, permitiendo que los valores y sabores naturales de los ingredientes se mantuvieran intactos iniciando una pujante industria de caldos y sopas deshidratadas.
Quizá San Martin, debió reclamar la patente”.



  Caravana durante el Cruce de los Andes
(Imágenes  gentileza del viaje personal realizado por el Dr Roberto Iermoli)


Espero que disfruten ahora de la lectura del texto, escrito desde la mirada de alguien que no es argentino y enviado por el Grupo de Arqueólogos del Perú.


La anchoveta y la papa nos dieron la libertad
Por Francisco J. Miranda

Hace unos días vino de visita a casa un amigo argentino que reconoció en mi estudio una réplica del Sable Corvo del General don José de San Martín.

El Sable Corvo es un arma simple y sencilla de caballería, comprada en Londres a fines de 1811, carente de oro, arabescos y piedras preciosas, es un fiel reflejo de la personalidad del generalísimo.

Sin embargo, no es un sable cualquiera, es un símbolo de la Nación Argentina y de toda la gesta libertaria chilena y peruana. Acompañó a San Martin desde la carga de caballería de la Batalla de San Lorenzo a orillas del Paraná, hasta su renunciamiento en Guayaquil.

Luego San Martin volvió a su patria, y encontrando un enfrentamiento fratricida, responde con hidalguía a quienes quieren que tome partido: “Por respuesta mi sable, la libertad del mundo, el estandarte de Pizarro, y las banderas de los enemigos que ondean en la Catedral, conquistadas con aquellas armas que no quise teñir en sangre argentina”.
Es cosa segura que el General, jamás hubiera desenvainado su sable, contra sus compatriotas.


San Martín fue sin duda un héroe real e íntegro, en el que pueden encontrarse extraordinarias cualidades: fue un estratega militar inteligente y valiente, con un espíritu elevado, carácter firme, sencillo, cordial y un amoroso padre.

El Libertador vivió hasta 1850 y muchos solo conocen su historia hasta la célebre y misteriosa entrevista de Guayaquil con Simón Bolívar, en 1822.


Para algunos San Martin pierde su atractivo histórico frente a Bolívar por sus renunciamientos, sin tomar en cuenta que tuvo una de las vidas más atractivas y extraordinarias de la historia y muy pocos comprenden su abdicación a favor del Libertador venezolano. En medio de la plenitud de su gloria, San Martin deliberada y voluntariamente opto por el ostracismo y el silencio; no por egoísmo, no por cobardía, sino en un acto de conciencia objetiva y respeto a sus propios valores.

El objetivo de tan extraordinario hombre era la independencia, pero también la unidad. Por eso quiso fomentar gobiernos fuertes, no importándole si eran unipersonales, ya que creía que esta forma de gobierno era necesaria para la situación de dispersión y anarquía que existía en las colonias hispanas en aquellos años. Por eso también propuso la monarquía constitucional –al estilo inglés- ya que creía que con ella se podía poner fin a la guerra civil y asegurar la soberanía de las naciones recientemente fundadas.


Es muy probable también, que San Martin supiera desde antes de su entrevista con Bolívar; que su compatriota Bernardino Rivadavia, prefería gastar los fondos de la aduana de las Provincias Unidas del Rio de la Plata, en embellecer las plazas de Buenos Aires antes que enviar refuerzos o dinero al Libertador en el Perú.


La verdad sobre el encuentro que sostuvieron Bolívar y el emancipador de Argentina, Chile y Perú, en Guayaquil el 26 de julio de 1822, será siempre fuente de polémica. Pero el Profesor Armando Martínez, encontró en Ecuador, dos gruesos volúmenes de documentos del general José Gabriel Pérez, secretario de Bolívar. Y en su interior encontró una copia de una carta confidencial escrita por Pérez, por orden de Bolívar, al intendente de Quito resumiendo su encuentro con San Martín. 


La carta refiere que el encuentro entre Don José de San Martín y Don Simón Bolívar fue cordial y registra el desacuerdo entre los dos sobre el tipo de gobierno que debía ser implantado en el Perú independiente. San Martín, como ya sabemos, quería una monarquía liderada por un príncipe europeo. El documento también registra las quejas de Don José respecto a sus compañeros de armas que lo habían abandonado.
Y elogia también la idea de Bolívar de crear una Federación de estados americanos.

El historiador Ricardo Palma nos muestra al San Martín estratega y militar juicioso, que prefiere usar la inteligencia, los ardides y la política, antes que exponer la vida de sus soldados, que no le sobraban, según expresan sublimemente sus palabras:
"Con días y ollas venceremos".

San Martín quería apoderarse de Lima sin gastar una bala, ni una vida. Y la trama que urdió, hizo que el Virrey La Serna y sus tropas abandonaran Lima desde el 6 de julio, creyentes de un poderío militar patriota, que no existía. Como consecuencia las tropas patriotas tomaron Lima en la noche del 9 de Julio y el 28 de Julio se juró en Lima la Independencia del Perú con las célebres palabras que ya todos conocemos: "El Perú es desde este momento libre e independiente por la voluntad general de los pueblos y por la justicia de su causa que Dios defiende. ¡Viva la patria! ¡Viva la libertad! ¡Viva la independencia!"

Sin embargo, lo que pocos saben es respecto al “invento” sanmartiniano que no solo movió su ejército, sino que años después inspiraría un producto alimenticio de éxito mundial. Al más puro estilo Napoleónico, San Martin pensó en una forma alternativa y práctica de conservación de vegetales en vidrio (que fue inventada en tiempos de Napoleón) pensando claramente que “los ejércitos se mueven sobre sus estómagos”.


La historia nos cuenta que el 24 de enero de 1817, la columna al mando del General San Martín partió desde Mendoza para sumarse al resto del Ejército de los Andes e iniciar la lucha por la libertad de América. El cruce de la cordillera representaba un gigantesco desafío para el ejército libertador. San Martín se las arregló para llevarlo adelante con éxito. Y para ello aplico la astucia necesaria a fin de alimentar sus tropas.


Jorge Sosa, escritor, poeta, humorista y periodista Mendocino, nos cuenta que San Martín recurrió a la sabiduría popular y encontró en una preparación llamada “Charquicán”, el alimento adecuado para las necesidades de la travesía. Estaba hecha a base de carne secada al sol, tostada y molida, y condimentada con grasa y ají picante; bien pisado, se transportaba en mochilas que alcanzaba para ocho días cada una.

Pero San Martin, le agregó algo; la deshidratación de verduras. Fue así que ajos, albahaca, espinaca, camote, papas, cebollas, zanahorias y zapallos fueron deshidratados con ayuda del sol mendocino. Las hortalizas se metieron en recipientes y a la hora de comer preparaban una sopa de vegetales acompañando al “Charquicán”, calentando agua y agregando una cucharada de sus verduras deshidratadas.

Juan Carlos Rogé, otro autor mendocino, nos cuenta como era el “Charquicán del Libertador”:
“Guiso en base a charqui en hebras, molido en el mortero, al que se echa en una olla con cebolla picada donde se fríe con aceite o grasa. Se agregan papas y zapallo cortado en trocitos, porotos tiernos, arvejas, etc. Y se condimenta con sal, pimienta, ají orégano”.

De hecho el origen del “Charquican” se le adjudica a la Civilización Caral, hace 5000 años. La palabra viene de la lengua quechua y significa "carne secada al sol", pero el plato tiene sus orígenes en los restos de peces y mariscos hallados en el complejo arqueológico de Caral donde el alimento era la anchoveta secada al sol, luego de ser salada previamente. Existen numerosas recetas del “Charquicán” en los Andes, pero siempre fue Charqui (carne seca) y papa la base.

En la provincia de Huara se ha rescatado este platillo con el nombre de “Charquicán de anchoveta", ya que la costumbre de secar alimentos y peces como la anchoveta es una actividad que se continúa practicando en la provincia de Huaura, específicamente en la caleta de Carquín, hasta nuestros días.

Ruth Shady, descubridora de Caral nos dice: “En la etapa de formación de la civilización Caral, el recurso marino y, en particular, la anchoveta (“Engraulis ringens”), tuvo un papel crucial para balancear la alimentación de la población y para sustentar el desarrollo social”. Y su mensaje es: “Volvamos a consumir nuestros pallares, papas, frijoles, olluquitos, combinados con anchoveta para garantizar el normal desarrollo del cerebro y la inteligencia, así como el adecuado funcionamiento cardiovascular”.

¿Acaso piensan que digo que San Martin invento el “Charquican”? Por supuesto que no.
Simplemente destaco que lo utilizo inteligentemente, variando la carne seca según su disponibilidad, y aquí en el Perú no despreció la carne de anchoveta. Su genial idea fue el “complemento” que movió a su ejército libertador con una buena alimentación: la deshidratación de diferentes verduras.

De hecho, en 1838, antes que San Martin falleciera, Carl Heinrich Knorr perfeccionó el método de deshidratación de vegetales, permitiendo que los valores y sabores naturales de los ingredientes se mantuvieran intactos iniciando una pujante industria de caldos y sopas deshidratadas.
Quizá San Martin, debió reclamar la patente.

Pero lo que nos queda claro, es que gracias a su primer contacto con el “Charquican” en Mendoza, el Generalísimo y su genial habilidad militar permitieron que, en el Perú, la anchoveta seca y la papa nos dieran la libertad.

Felices fiestas patrias!


sábado, 6 de agosto de 2016

Mal de Parkinson (II) Recuperación de percepciones con fuerte tono afectivo y la remisión de síntomas



                                          El tango, por la artista plástica Lucy Mattos

Esta breve entrada está dedicada a la recuperación de percepciones auditivas y corporales con fuerte tono afectivo
La interacción positiva entre la recuperación de sensaciones corporales afectivas registradas durante juventud, y la frustración generada por los movimientos involuntarios asociados con el mal de Parkinson, son abordadas exitosamente en los talleres experimentales de Tango realizados en el Hospital de Clínicas José de San Martín, dependiente de la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires (UBA)
Recordando el concepto de "marcador somático positivo" elaborado por el neurofisiólogo Antonio Damasio, me permito conluir que el éxito obtenido radica en la recuperación de percepciones placenteras de distinto tipo (visuales, auditivas, kinésicas) ancladas en el cuerpo durante la juventud temprana y constituye el factor crucial que facilita enormemente la remisión de síntomas corporales asociados con diferentes patologías neurológicas. 


                                 Taller de Tango del Hospital de Clínicas:




Taller “Locos por el Tango” del Hospital J.T. Borda

Las practicas de baile facilitadas por Talleres de Tango, también han resultado exitosas para la remisión de síntomas psiquiátricos.
En el Hospital Interdisciplinario Psicoasistencial José Tiburcio Borda de la ciudad de Buenos Aires, se realizaron estudios clínicos con el propósito evaluar los efectos positivos de la práctica del tango sobre diferentes patologías psiquiátricas.
El programa de talleres se titula “locos por el Tango” y el estudio inicial fue impulsado por la Fundación Favaloro, cuyas conclusiones recibieron reconocimiento internacional.



                                                                                      Hasta la próxima amigos!!!